Declaración de Fe

Creemos un solo verdadero, viviente y eterno Dios, de infinito poder, sabiduría y bondad; hacedor y preservador de todas las cosas, ambas visibles e invisibles. Creemos que el Hijo, quien es la Palabra del Padre, el Espíritu Santo y eterno Dios, de una misma sustancia con el Padre, tomó naturaleza humana en la matriz de la virgen María para que nos enteras y perfectas naturalezas, es decir, la divina y humana, fueron unidas en una persona para nunca ser divididas, en Cristo Jesús, Dios y hombre perfecto.

Creemos que Jesús murió y vertió su sangre en la cruz para perdón de pecados y para la salvación del pecador.

Creemos que Jesús verdaderamente resucitó de los muertos en su cuerpo, en una naturaleza humana perfecta, y que ascendió al cielo. Qué está sentada a la diestra del Padre hasta que regrese a buscar a toda la humanidad en el día postrero.

Creemos que el Espíritu Santo procedente del Padre y del Hijo, es una misma sustancia, majestad y gloria con el Padre y el Hijo, único y eterno Dios.

Creemos que la inspiración verbal y plenaria de las Sagradas Escrituras, conocidas como la Santa Biblia compuesta de 66 (sesenta y seis) libros y dividida en dos partes Antiguo y Nuevo Testamento.

Creemos en la sanidad divina como parte de la obra redentora de Cristo en la cruz. (Isaías 53:4-5, Mateo 8:16-17, Marcos 16:14-18, Santiago 5:14-16).

Creemos en el bautismo por inmersión en agua como sello que hemos muerto y resucitado con Cristo. (Romanos 6:4; Colosenses 2:12).

Creemos que la responsabilidad todo creyente hacer el trabajo de la Gran Comisión, de compartir con otros las buenas nuevas del Evangelio (Mateo 28:19-20; Hechos 1: 8).